La obra empezó en el mes de noviembre de 2019 el mes de enero y ha tenido dos partes: el entorno de la iglesia Santa María de Villacones y la pasarela sobre el río Muera por un lado y la conexión desde la pasarela a la senda verde, por el interior de las salinas.
Se iniciaron las obras en el mes de noviembre con la conexión, siendo un tramo delicado al tener que entrar dentro de la zona arqueológica. Esta obra la ha realizado una constructora especializada en restauración y gracias a su conocimiento de las especificidades constructivas del valle y al reciclaje de piedra labrada de la zona se ha conseguido que dicho camino se integre bien entre las eras.
La segunda obra, la de la pasarela, sufrió las vicisitudes del confinamiento lo que supuso un cierto retraso sobre el programa inicial. Así mismo la presencia de una estación de aforos no prevista inicialmente, obligó a un cierto ajuste de la obra. A pesar de la situación complicada, el esfuerzo y celo de las personas implicadas, permitieron terminar la obra a finales del mes de abril.
Esta obra se ha finalizado en época de confinamiento y desde estas líneas un agradecimiento especial a las personas que han intervenido en la obra en estas circunstancias tan complicadas y excepcionales.